Javier Albo/La Rioja
La empresa adjudicataria del servicio de ayuda a domicilio (SAD) en Santo Domingo de la Calzada ha comunicado al Ayuntamiento, «pasado el plazo legal de preaviso», indica este último, que renuncia a la prórroga de un año a la que tenía opción según contrato.
El equipo de Gobierno ha anunciado que va a iniciar el procedimiento hacia una nueva licitación, «porque no pretendemos que continúe una empresa que no quiere seguir», y asegura que, durante todo el proceso, el servicio está asegurado.
El alcalde, David Mena, indicó ayer que esta situación «nada tiene que ver con el desastre que estalló cuando gobernó el PSOE en 2019, con un servicio que ya había expirado ocho meses antes y que seguían sin adjudicar, y con la intención de la empresa de abandonar el servicio de inmediato, que estaba dando de forma excepcional, y que interpuso un contencioso-administrativo al Ayuntamiento». El regidor afirma que fue su partido el que «arregló el desaguisado».
Por su parte, el Grupo Municipal Socialista exige que se aclare si hay que licitar de nuevo el servicio, y, de ser así, pide que «se comience con la adjudicación a la mayor brevedad posible puesto que es uno de los servicios fundamentales que presta el Ayuntamiento hacia la ciudadanía».
Izquierda Unida, que aboga por un modelo de SAD gestionado por una empresa pública, subraya que la empresa dejará de prestar el servicio, «prácticamente nada más conformarse el gobierno municipal surgido de las urnas». La formación anticipa que, dado que se trata de un servicio muy importante para la ciudad, tanto por el número de usuarios como por el volumen de la plantilla, «vamos a exigir información y pasos efectivos para que el gobierno en minoría de la moción de censura no tenga la más mínima tentación de guardar el asunto en un cajón y que sea un problema que estalle en la cara de la próxima Corporación».
